En 2020, Apple sorprendió con una línea más diversa que nunca, lanzando cuatro versiones del iPhone 12: el mini, el estándar, el Pro y el Pro Max. En este análisis nos enfocamos en el iPhone 12 Pro, el modelo intermedio entre los más avanzados, que combina muchas de las novedades de la gama sin llegar a los extremos del Pro Max.
Este equipo se presenta como una propuesta ambiciosa en fotografía, aunque sin alcanzar el nivel del modelo más grande. Integra además un nuevo diseño que marca un antes y un después en la estética de los iPhone de gama alta. Probamos a fondo su rendimiento, cámaras y funciones, y aquí te contamos nuestra experiencia.
Un diseño que rescata el pasado
El cambio más evidente respecto a generaciones anteriores está en el diseño. Apple deja atrás las curvas suaves que caracterizaron desde el iPhone 6 hasta el 11, para recuperar las líneas rectas y bordes planos del iPhone 4 y 5s. Este giro retro puede ser tanto una mejora como una cuestión de gustos.
La parte trasera mantiene un acabado mate que ofrece buen agarre y evita que se ensucie con facilidad. En cambio, los bordes brillantes, aunque estéticamente atractivos, siguen siendo imanes para las huellas. El diseño es compacto y elegante, con una sensación sólida al sostenerlo.
Rendimiento y potencia al nivel de lo esperado
El iPhone 12 Pro incorpora el chip Apple A14 Bionic, el primero de la compañía construido con tecnología de 5 nanómetros. Este procesador entrega una respuesta rápida en todas las tareas, desde navegación y multitarea hasta edición de video o juegos exigentes.
Cuenta con 6 GB de RAM y está disponible en versiones de 128 GB, 256 GB y 512 GB de almacenamiento interno. En cuanto a software, viene con iOS 14, que aporta mejoras de personalización, privacidad y rendimiento general.
Un panel de alta calidad
La pantalla es una Super Retina XDR OLED de 6,1 pulgadas, con una resolución de 2.532 x 1.170 píxeles y una densidad de 460 ppp. Ofrece una experiencia visual muy nítida, colores vivos y negros profundos. Además, es compatible con HDR10 y Dolby Vision, lo que la hace ideal para consumir contenido multimedia con alto rango dinámico.
Cámaras: más versátil que el iPhone 12, menos que el Max
En el apartado fotográfico, el iPhone 12 Pro da un paso adelante respecto al modelo base. Su sistema de triple cámara trasera incluye un sensor principal de 12 MP con apertura f/1.6, un teleobjetivo también de 12 MP y un ultra gran angular de 120 grados. Además, incorpora un escáner LiDAR que mejora el enfoque en condiciones de poca luz y la experiencia con realidad aumentada.
Graba videos en calidad 4K a 60 fps, incluyendo compatibilidad con Dolby Vision, una característica que le otorga un plus profesional en grabación. En la parte frontal, una cámara de 12 MP se encarga de las selfies y el desbloqueo facial con FaceID.
Batería y carga: con luces y sombras
Aunque no hay datos oficiales sobre la capacidad de la batería, en el uso cotidiano ofrece una autonomía aceptable para una jornada completa. Soporta carga rápida de hasta 20W, aunque el cargador no viene incluido. También es compatible con MagSafe a 15W y con carga inalámbrica Qi de hasta 7,5W.
Conectividad completa
El iPhone 12 Pro es uno de los primeros iPhone en incorporar conectividad 5G, tanto en bandas sub‑6 GHz como mmWave. Además, ofrece Wi‑Fi 6, Bluetooth 5.0, NFC y LTE avanzado. Esto asegura velocidades de navegación y transferencia de datos más rápidas y estables.